domingo, 4 de septiembre de 2011

El Capricho


Vuelve un servidor de las vacaciones y aunque ya se ha incorporado a sus labores se resiste a dejar atrás ese tiempo de relax que el estío conlleva. Por eso en esta mañana nubosa de Septiembre ha cogido su cámara y se ha ido a uno de los parques más desconocidos de España. Precisamente ese desconocimiento hace que se conserve en un estado excelente y, aunque tiene visitantes, no se observan en él las multitudes que abarrotan otros jardines y que se empeñan denodadamente en acabar con los mismos.

Es el parque del Capricho, situado en las afueras de Madrid yendo hacia Barajas, en la zona conocida como alameda de Osuna. Fue creado por la duquesa de Osuna en el siglo XVIII y alberga numerosos ambientes, desde un parterre francés hasta un estanque donde predomina el estilo oriental. Incluye además numerosas edificaciones y pabellones de la época y que recreaban distintos estilos de vida que lo asemejan a una especie de parque de atracciones de la época.

Así podemos encontrar desde una casa rústica (imitando las viviendas de la plebe) llamada la Casa de la Vieja, hasta un majestuoso Casino de Baile donde los nobles se pegaban unas fiestas de mucho cuidado y de los que salían en barca por un río artificial para llegar a el estanque anteriormente citado donde aparcaban las “naves” en una casa de juncos china. Abundan también las estatuas y edificios de corte neoclásico, entre los que destaca un templete dedicado al dios del bebercio, léase Baco, que se alza en medio de las praderas. Incluso tiene una ermita en la que vivió fray Arsenio, un ermitaño que allí se dedicó a la oración y que fue enterrado en sus proximidades. Tras éste, ocupó su lugar un amigo suyo, pero a principios del siglo XIX el ermitaño fue sustituido por un muñeco autómata para regocijo y solaz de los visitantes, aunque poco piadosa parece esta medida.

También fue sede del ejército republicano durante la guerra Civil, como atestiguan diversos búnkeres y refugios que allí se observan entre la maleza. Posteriormente cayó en el abandono y fue reconstruido en los años 70 por el Ayuntamiento de Madrid, al cual pertenece en la actualidad.

En fin, una maravilla para la vista y el espíritu que guarde Dios muchos años de turistas en excursiones masivas, visitantes vandálicos, perros y niños con pelota (mejor dicho, jugar a la pelota, no los niños). Los perros y las pelotas están prohibidos pero los primeros o los segundos podrían aparecer en cualquier momento y entonces, el encanto del Capricho habrá llegado a su fin.

Quedan aquí unas fotos y unos enlaces.
















miércoles, 31 de agosto de 2011

Firenze, Toscana, Italia


Florencia, la cittá dei fiori. La ciudad de las flores donde conviven la memoria y las obras de Miguel Ángel, Dante y el Giotto, Sede universal del Renacimiento y corazón de la vieja Toscana que atraviesa el Arno. No tiene Florencia el pasado esplendor y la majestuosidad de Roma, ni tampoco el romanticismo de Venecia, pero sí el encanto del tiempo y el de la belleza en las Artes. Todo aquel que pasea por sus calles y plazas es como si experimentara un viaje en varias etapas por el túnel de la Historia.

Por un lado, hasta los confines del Medievo con sus damas,trovadores y príncipes; por otro, hasta el siglo XIX cuando se formó la Italia moderna. Incluso podría añadirse un tercer periplo que nos lleva el neorrealismo de los años 50 y60: callejones adornados de bicicletas, ese olor sempiterno a tomate y especias para la pasta que a veces parece inundar toda Italia y señoras que vociferan desde los balcones la hora de la comida — ¡“Il pranzo!”mientras niños que de mayores serán varones de perfiles cesáreos o modelos de Armani juegan despreocupados a sus eternos juegos que no tienen edad.

Hay mucho paralelismo entre la Toscana y Castilla pero también entre España e Italia. Las primeras comparten el ser la cuna de sus lenguas nacionales y también el recuerdo de la Edad Media; también desgraciadamente el ser regiones menos industrializadas lo que les obliga a vivir en gran medida del turismo de tipo histórico, aunque Castilla está aún más despoblada.

España tiene mucho en común con Italia, incluso más si cabe que con Portugal, siempre teñido de saudade. El carácter de españoles e italianos es más abierto y similar; los españoles más serios y desconfiados, aunque ello forma parte de la evolución de la sociedad española, siempre en declive en los últimos tiempos. Las costumbres son asombrosamente similares, desde la presencia en Italia de salones de “bodas, bautizos y comuniones” (así se anuncian en la radio literalmente) hasta los chistes de Jaimito (aunque allí el pérfido mozalbete tiene otro nombre, que no recuerdo).

Pero, sobre todo, Italia y España son los herederos más próximos de la antigua Roma, los que asimilaron la lengua y la cultura latinas y las perpetuaron por los siglos de los siglos. Aunque las Alianzas de Civilizaciones y la nueva Inquisición de lo políticamente correcto intenten hacer olvidar esto, nunca podrán acabar con ello.

Somos romanos que hablan español.


lunes, 1 de agosto de 2011

No quedan días de verano


No quedan días de verano, que dijo Amaral y, desde luego, tampoco hay fechas en el calendario para perdonar lo que has hecho, como apuntó con tristeza Rubén Múgica aunque esta vez no se refiere sólo a los asuntos del Norte, que ya es. Sentiremos tu ausencia y nos acordaremos de ti, tenlo por seguro, pero no porque te echemos de menos sino porque tenemos bien presente lo que nos has dejado; no se puede borrar lo pasado en estos siete años negros.


Siete años de desgracia, como si se hubiera roto el espejo de España por una maldición de Némesis, la que castigó a Narciso a enamorarse de sí mismo y a quedar atrapado en el charco de agua observando su propia imagen. Otros nuevos imitadores de aquel mito quedaron también embelesados hace un tiempo, como si la imagen que devolvía el espejo fuera maravillosa. Mas no, era sólo un espejismo, un sueño de la razón que nos llevó a creer que éramos dioses cuando nuestra verdadera naturaleza era solo de ídolos de barro.


Siguió girando, no obstante, el tiovivo de las ilusiones y de los engaños durante siete años hasta que la realidad se abrió paso y todos la contemplamos con el corazón en un puño. El camino escogido había sido el peor de todos, pero fue bueno y bonito mientras duró, por lo menos al principio. Ahora la senda se torna áspera, dura y llena de obstáculos, vendrá el llanto y el crujir de dientes, pero todavía incluso a pesar de ello habrá ciegos de mente que achaquen los males a entes difusos: los mercados, los especuladores, el destino.


El futuro que nos dejas es incierto y lleno de negros nubarrones que acechan sobre nuestras cabezas a la espera del trágico desenlace que muchos presienten y que casi todos esperan. Porque esto no hay quien lo arregle en mucho tiempo, ni las gaviotas, ni mucho menos las rosas.


Ahora caminaremos con recelo para no volver a caer en otro desengaño. No volvamos a ser ingenuos. No volvamos a creer en otro como tú.


Desde luego si pienso en ti, siento que esta vida no es justa.

miércoles, 13 de julio de 2011

La berenjena futbolística



Una asociación republicana ha creado una camiseta para la Selección…para la hipotética selección republicana de fútbol. De este modo, ya los previsores pueden tener en su ajuar el atuendo adecuado para echar un partidito en tiempos venideros si se da la vuelta a la tortilla. La zamarra en cuestión es bastante poco agraciada y recuerda a una especie de chándal bolivariano; asimismo incorpora una estrella roja en el escudo pero no es nada prosoviético, aunque lo parezca, sino el símbolo de campeones del mundo.


Vuelven a olvidarse de que estos colores no son los de la República, sino la de un régimen republicano que duró ocho años y que constituye uno de los momentos más trágicos y funestos de la Historia de España. Durante la primera República, la bandera era la misma de ahora pero eso no se cuenta en los círculos izquierdistas más radicales porque se les caerían los palos del sombrajo a más de alguno.


No teníamos bastante con el “moderno” y necio mote de “la Roja” —aunque es evidente que va con segundas— para ahora encontrarnos con este amasijo cromático que vestirían los futbolistas a modo de modernos nazarenos laicos; la única duda es cómo se llamaría al combinado nacional que vistiera aquesta T-shirt (que dirían los cursis). Quizás, la “rojimorada”, quizás la “berenjena” e incluso quizás la “permanganata”. La causa de esta última y pintoresca denominación se debe al permanganato potásico (MnO4K), un producto moradísimo que lo mancha y lo pone todo perdido aunque tiene sus virtudes, pues antiguamente se usaba sobre el genital instrumento en lavajes para prevenir las enfermedades propias del fistro sexual cuando éste se usa fuera de casa y en lugares donde no se debería usar si no se quiere tener una bronca con la parienta que resultaría asaz turbulenta.


En fin, Serafín que no parece que vayan a vender muchas pero ahí está la cosa y ya se sabe que sobre gustos no hay nada escrito. Lo que sí van a conseguir un día de estos es que un servidor se vuelva monárquico, que mira que es difícil, oye. Claro que cosas más raras se han visto.

lunes, 11 de julio de 2011

Audiencias y licencias

Con la llegada de la TDT a España muchos pensábamos que ello supondría una mayor oferta informativa y, por tanto, un mayor pluralismo que contrarrestara el enorme peso mediático que ostentaba el poder sobre las cadenas existentes. La cruda realidad ha venido a darnos en las narices y a confirmar que el oligopolio existente sigue teniendo la sartén por el mango.

Con el fin de la publicidad en TVE, todo hacía suponer que el enorme pastel publicitario que quedaba libre se repartiría entre el resto, mas no ha sido así. Los anunciantes contratan su publicidad en función de la audiencia y las nuevas emisoras no pueden competir con las grandes cadenas generalistas que, debido a su mayor audiencia, les han dejado poco más que las migajas. El resultado es que más de una emisora ha tenido que cerrar y las demás andan con problemas.

Ahora bien, ¿cómo se mide la audiencia? ¿Es cierto que las grandes cadenas tienen tanta audiencia y las pequeñas tan poca? Pues es bastante discutible. Sólo 4600 ciudadanos (panelistas, en el argot) que tienen en su casa el famoso audímetro son los que deciden; el problema está en que recientemente se han desvelado que hay bastantes trampas. Gente que puntúa programas que no le gustan simplemente para fastidiar a otras cadenas, cadenas que son puntuadas porque un familiar suyo trabaja allí, usuarios que si les gusta el programa ponen que lo están viendo más miembros de la familia que los que realmente están haciéndolo, otros que nunca puntuaron las cadenas de TDT mientras existieron las analógicas porque eran las que veían, etc. Véase un ejemplo (o dos, que diría Mariano) de esta auténtica chapuza:



Es evidente que este sistema deja bastante que desear. Bueno, pues con estos datos tan “fiables” se calcula el share, el rating y otros palabros que deciden donde se pone dinero en publicidad. Hace falta otro sistema, o muchísimos más aparatejos de esos para que los resultados sean veraces (la media aritmética de un conjunto de datos se aproxima al valor verdadero sólo cuando el número de datos es muy grande). Además se impone controlar más a los privilegiados que disponen del cacharro, que ya se ve que pueden hacer de las suyas.

El otro sistema en que se basan los anunciantes es el famoso EGM (Estudio General de Medios) que funciona a base de encuestas y del cual es mejor no hablar, porque ya se citaron hace tiempo sus múltiples fallos.

Se puede llegar entonces a la conclusión de que, a lo mejor, los programas de telebasura no son tan vistos aunque así lo parezca; de hecho, nadie o casi nadie confiesa verlos aunque luego figura lo contrario, si bien puede ser que por vergüenza se nieguen. Y, desgraciadamente, también se puede aventurar que programas buenos pueden ser retirados por un capricho de los dedos panelistas; e incluso se puede llegar más aún: cadenas que han cerrado o pueden estar a punto de echar el cierre tendrían más audiencia de la reflejada con este método y a lo mejor hubieran salido adelante.

El pluralismo se resiente además por otro aspecto que, unido al anterior, impide la existencia de nuevas cadenas estables, como es la concesión de licencias. Constituye un enorme despropósito el que una emisora radiofónica o televisiva necesite una licencia para poder salir al aire, licencia que otorga el poder establecido muchas veces en función de simpatías o afinidades políticas o personales, aunque se diga lo contrario. El día que Libertad Digital, por ejemplo, obtenga una licencia nacional, será el que las ranas críen pelo que no sea el de la ceja ni el de la barba.

Mucho mejor sería que se eliminaran las funestas licencias y quien quiera emitir que emita siempre que la frecuencia esté libre; bastaría un organismo arbitral que cuide este aspecto y que adjudique las frecuencias libres o desalojadas por otras cadenas sin más trámites que los puramente administrativos. Si salen adelante o no, ése ya sería su problema (con el permiso de los aparatitos, claro).

De este modo, entre la dictadura de las audiencias y el despropósito de las licencias, es muy posible que la completa libertad de expresión en España sea una quimera. ¿Harán algo los políticos para solucionar esto? Evidentemente, es una pregunta retórica.

sábado, 9 de julio de 2011

El idealismo en la poesía de la guerra Civil (y II)


El soneto que ilustra esta segunda entrega es aquel que dedicó Dionisio Ridruejo a Franco tras sus victorias en el frente del Ebro.


Del Hacho al Pirineo has avanzado,


vega de espadas, despertando el brío,


y ya rige tu fuerte señorío,


del Océano al mar, tierra y Estado.



En su gloria de alcázar restaurado,


campamento guerrero en sol y frío,


quiere otra vez al Orbe por navío


tu solar de Castilla asegurado.



Padre de Paz en armas, tu bravura


ya en occidente extrema la sorpresa,


en levante dilata la hermosura,



al norte es muro y en el sur empresa,


mientras reclama toda su aventura


el pueblo que acompaña tu promesa.



Como en el caso anterior no se va a tratar el personaje al que se dedica la poesía sino ésta en sí y lo que de ella se traduce.


Puede comprobarse como el idealismo que conduce al fervor por el líder y señala sus méritos excepcionales es muy similar a la de Machado; quizás aquí sea incluso más auténtico pues, a diferencia de éste (ya se ha explicado en el artículo anterior), Ridruejo no temía depuraciones de ningún tipo. Posteriormente se enfrentó a Franco y fue condenado a destierro y a prisión en varias ocasiones.


Frente al concepto de “lucha santa” tan aparentemente contradictorio que se establece en el soneto a Líster, no aparece en éste ninguna referencia a la religión ni a Dios, lo que no deja de ser insólito teniendo en cuenta las características del régimen nacido el 18 de Julio. Sí se atisba en el poema una cierta referencia al imperio, a tenor de la gran profusión de términos geográficos que se expresan.


Machado cita la Religión y España; Ridruejo a la Paz y al pueblo. ¿Es una contradicción? Seguramente, no. Religión, España, paz, pueblo: valores y conceptos que trascienden las épocas y las personas y que están en todos nosotros, con un significado particular para cada ser humano, pero están. Forman parte de la grandeza del ser humano y, particularmente, de los españoles.



miércoles, 6 de julio de 2011

El idealismo en la poesía de la guerra Civil (I)


Comienza aquí una pequeña serie de dos entregas sobre la poesía en la guerra Civil española. Son dos muestras —una de cada bando— aparentemente separadas pero que tienen mucho en común si se analizan del modo más imparcial posible. En ambas se encuentra el idealismo como eje fundamental del pensamiento de los españoles de entonces.


En la opinión de éste que escribe, hoy el modo de vida nos hace ir a lo práctico y tener los pies en el suelo, desgraciadamente demasiado en el suelo. Podrá argumentarse que los sueños imposibles son tareas vanas, pero los filósofos reconocen los valores que subyacen en lo utópico. Por un lado, orientan hacia el futuro; no se hubieran inventado los aviones si desde hace siglos no hubiera existido el irrefrenable deseo humano de volar; tampoco se hubiera conquistado un Imperio a no ser por los sueños de aquellos aventureros que se lanzaron más allá de la Mar Océano sin saber que se encontrarían al final de su viaje que muchos presumían al abismo.


Por otro, el idealismo nos permite tener esperanzas, imprescindibles para seguir en la vida. Y también la comparación con la sociedad idílica nos permite criticar la realidad existente y subrayar sus defectos. Sí, es bueno ser idealista, aunque sin vivir totalmente en La Inopia.


Una vez realizado este preámbulo, veamos el primer texto. Confieso que esta es una de las poesías que más me gustaban en mi juventud, como a muchos que entonces simpatizábamos o militaban en la izquierda. Con el paso de los años, la ideología ha cambiado o desaparecido pero la reflexión continúa.


Es el soneto que Antonio Machado dedicó al comunista Líster, “Jefe en los Ejércitos del Ebro” y muy conocido por la estrofa “Si mi pluma valiera tu pistola”. Poco importa aquí el personaje al que se dedica el texto, sino el texto en sí.


A LÍSTER, JEFE EN LOS EJÉRCITOS DEL EBRO

Tu carta -oh noble corazón en vela,

español indomable, puño fuerte-,

tu carta, heroico Líster, me consuela,

de esta, que pesa en mí, carne de muerte.


Fragores en tu carta me han llegado

de lucha santa sobre el campo ibero;

también mi corazón ha despertado

entre olores de pólvora y romero.


Donde anuncia marina caracola

que llega el Ebro, y en la peña fría

donde brota esa rúbrica española,


de monte a mar, esta palabra mía:

"Si mi pluma valiera tu pistola

de capitán, contento moriría".


El idealismo casi utópico se plasma en varios detalles que se explican a continuación. Ya se sabe que el comandante del Quinto Regimiento no era precisamente un niño del coro pero Machado lo exalta hasta la veneración, (“noble corazón en vela, español indomable…”) con la fe propia de los que ven, equivocadamente o no, virtudes extraordinarias en las personas o en las cosas que admiran o defienden. Hay que decir también que posiblemente Machado escribiera tan excesiva hagiografía por su afán de quedar bien con el Frente Popular y evitar represalias o depuraciones —sobre todo tras el apoyo de su hermano Manuel a la causa de los nacionales— como apunta en alguno de sus libros César Vidal. Como ya se ha apuntado, siempre se debe combinar la idealización con el pragmatismo para salir adelante en la vida.


Llama asimismo la atención el que hable de “lucha santa”, máxime cuando la España republicana era laica e incluso antirreligiosa. Ello se explica porque el poeta era creyente, como muchos otros republicanos, y nuevamente el idealismo sublima los hechos uniendo a Dios con la causa que se cree justa. Sorprende también la declaración de superioridad de las armas frente a las letras (“si mi pluma valiera tu pistola”), y más en una persona cuyo talante era más bien pacífico, aunque la utopía nos dice que la felicidad puede llegar tras la tragedia y la guerra no sería sino un paso hacia un mundo ideal.


Por otro lado, la presencia de frases como “esta rúbrica española” o “español indomable” nos hacen ver que la idea de España está siempre presente en Machado, como es observable también en el resto de su obra. Una visión utópica y a veces crítica e incluso contradictoria (fue miembro de la Asociación de Amigos de la Unión Soviética) como es común a la Generación del 98, pero desde luego muy distinta a la del Frente Popular.


Religión y España son valores normalmente atribuidos a la derecha, pero esto no es cierto en sí mismo, sino que forman parte de nuestra herencia genética y cultural aunque sean interpretados de distinto modo. Seguramente si D. Antonio hubiera sido de derechas habría escrito un soneto semejante a Franco, Mola o Moscardó, y no sólo por afinidad ideológica, sino también porque los ideales comunes están en el inconsciente colectivo de todos los españoles.


(Continuará).

martes, 28 de junio de 2011

Puerta del Sol, se llama Puerta del Sol


La Puerta del Sol es el corazón del Madrid Eterno y el centro de esta urbe cosmopolita y todavía algo provinciana que, por el momento, sigue siendo la capital de la todavía existente Nación Española. En ella resuenan todos los ecos de la reciente Historia de España y es el origen de todos los caminos y carreteras patrios. En su viejo reloj nos fijamos todos los españoles la noche de San Silvestre para saber que empieza el nuevo Año, compendio de ilusiones, promesas y renovaciones casi siempre efímeras, pero eso es otro cantar. Allí se proclamó la infausta segunda República y un histórico 2 de Mayo su suelo quedó regado con la sangre de los madrileños que se enfrentaron con valor al ejército más poderoso de su tiempo.


Aunque parezca una plaza, no fue así en sus orígenes. Era una de las puertas de la muralla que rodeaba Madrid a finales del Medievo y sobre ella había un sol que adornaba la entrada, de ahí el nombre. Similar función y cometido tenía la puerta del Sol de Toledo, todavía existente. El sol se colocaba en las antiguas puertas medievales que estaban orientadas a levante y ello explica el significado de tan planetario (que no pajiniano) anagrama. Según el ilustre escritor y cronista de la época don Juan López de Hoyos, la puerta fue derribada alrededor de 1570 para ampliar la ciudad, pero quedó el nombre para la posteridad.


En las últimas semanas, el histórico lugar ha sido una vez más protagonista, seguro que en esta ocasión muy a su pesar. Multitudes de gentes de lo más variopinto constituyeron allí una suerte de movimiento asambleario de dudosa eficacia aunque sí de mucho ruido y trastorno para vecinos y comerciantes de la zona. Perro flautas, despistados de buena fe, progres arrepentidos y gente de mediana o avanzada edad a lo que les place despotricar de todo (según Woody Allen, estos últimos suelen terminar en los supermercados predicando el socialismo) convirtieron la Puerta del Sol en un zoco de la protesta porque sí, en una autoarrogada y falsa representación del pueblo y, sobre todo, en un poblado chabolista de muy dudoso gusto.


Pero con todo, una de las cosas peores de toda la parafernalia desplegada es el atropello perpetrado al topónimo del lugar. Los autodenominados “indignados” han conseguido indignar a éste madrileño de toda la vida que aquí escribe rebautizando el sitio como “Plaza de Sol” en un alarde de horterismo que ofende al oído y a la estética.


¿Se imagina alguien que en Sevilla a la Puerta de Triana le llamara Plaza de Triana? El caso es el mismo, pues la histórica puerta se derribó a mediados del XIX pero todo el mundo llama Puerta de Triana no ya a una plaza sino a una confluencia de cuatro calles donde estaba el lugar. A tan iconoclasta variador de nombres allí le correrían a gorrazos o, peor aún, se cachondearían de él por cursi o por hortera.


Para cambiar la sociedad, no hay que ofender el buen gusto. Puerta del Sol, se llama Puerta del Sol ¿estamos?

jueves, 26 de mayo de 2011

Carta a Antonio M

Hola, Antonio M.

Recuerdo todavía aquel día en que nos conocimos en la histórica quedada de foreros de Libertad Digital TV en los primeros tiempos del zapaterismo cuando aquellos “disidentes” que nos reuníamos éramos sólo un puñado de fascistas, radicales y bellacos (a mucha honra, por cierto) . Me pareciste un hombre sensato, luchador y de unos conocimientos, lucidez y claridad de ideas que ya quisieran no pocos españoles, tanto de derechas como de izquierdas y sigo pensando lo mismo, más aun después de ver tus magníficos razonamientos y escritos que van superándose con el paso de los años.

Pasaste también brevemente por los blogs de Libertad Digital con el nick de LordGori, dejando huella y una magnífica prosa que supongo andará todavía en los archivos de la casa de LD, ese refugio de liberales, inconformistas, republicanos de bien e incluso progresistas razonables que critican a diestro y siniestro todos los males de nuestra España. Sigues teniendo un blog magnífico en blogspost y nos seguimos viendo en el foro de LDTV que ahora renace de sus cenizas cual Ave Fénix del ciberespacio y que promete nuevos tiempos de gloria si la cosa no se tuerce.

Sé que estás triste, Antonio M. Vives en una histórica región de España, Extremadura, noble y dura, tierra de conquistadores que se convirtieron en dioses tras su gran periplo de los campos de encinas a las selvas tropicales de las Américas. Buena tierra, pero extrema en muchos aspectos además de en el nombre, unos buenos y otros malos o, mejor digamos, menos buenos.

Extremadura lleva treinta años o más bajo un gobierno socialista que poco o nada bueno la ha proporcionado, en tu opinión, en la mía y en la de muchos, y que la ha situado en las cotas más bajas de las regiones españolas, fruto del clientelismo y la subvención. Por eso estabas ilusionado con el cambio aunque no seas del PP en sentido estricto, sino más bien crítico o muy crítico. Cuando la noche del domingo vi que el progresismo perdía por un momento la mayoría absoluta me acordé de ti y supe de tu alegría aun sin hablar contigo. Dicen que las mentes están en comunicación y creo que es cierto. Lo llaman telepatía y no tiene nada que ver con regalarle un aparato de televisión a la hermana de mi padre, aunque seguro que algunos lo creen en esta España todavía silvestre y algo cateta. Por eso, luego vino la pena y la decepción de ver que un solo escaño daba nuevamente la vuelta a la tortilla para desazón de todos aquellos que pensamos en los tiempos nuevos que deben entrar por todas las maltrechas rendijas de Hispania.

Mas siempre queda lugar para la Esperanza —y no me refiero a la de Madrid— sino a esa virtud que nos mantiene esperando que algún día nuestros deseos se hagan realidad. Los anhelos siempre se cumplen si tiene un buen propósito, y éste es el caso. Si los seguidores del prócer Cayo (que no es romano) dan su apoyo finalmente a la PSOE se retratarán del todo en la vieja y rancia foto de la unidad de la izquierda. Y como seguramente volverán a hacerlo mal, porque forma parte casi de su naturaleza, no habrá una siguiente vez en que vuelva a repetirse esta situación que te amarga. Será duro y quizás largo (o no, que diría Mariano), pero Extremadura saldrá adelante tarde o temprano, y tú lo verás con tus ojos. Créeme.

Un fuerte abrazo.

jueves, 19 de mayo de 2011

La vieja película

Hace ya un tiempo, éste que os escribe a la caída de la tarde desde la capital de la Gloria —mejor dejémoslo en ex-capital— mantuvo cierta conversación con una progresista. Diálogo simple y corto, pero seguramente repetido por otras personas y en otras lugares numerosas veces, aunque no por ello menos ilustrativo:

—Hay que ver lo mal que lo hace Zapatero.

—Bueno, el otro tampoco lo haría bien. Todos son iguales.

Llegamos aquí al meollo (que no es que me mee yo, sino el asunto central de la cuestión). Cuando la izquierda carece de argumentos, recurre frecuentemente en su lenguaje coloquial a la estrategia del “desprestigio global”, ese ventilador que disuelve los errores de un parte en el todo del despropósito humano para así minimizar los primeros.

La folklórica concentración en la Puerta del Sol —nada de “Plaza de Sol”, que suena fatal— es una aplicación práctica de la conducta anteriormente mencionada. Los allí reunidos proclaman enfáticamente “No les votes”, en referencia al PSOE y al PP, juntos y además revueltos con posiblemente bastante intención. Es probable que los españoles (34 millones) no hagan mucho caso a esta mezcolanza de indignados, perroflautas y curiosos que por allí merodean (unos 7000) pero imaginemos por un momento que sí lo hicieran.

Si no se vota a estos partidos, sólo queda como alternativa un universo de opciones minoritarias nebuloso y misterioso (los convocantes no citan explícitamente a ninguna) y que son precisamente la opción electoral escogida por los protagonistas de la historia.

¿Cuáles podrían ser las consecuencias de esto? El ZapaSOE en las circunstancias actuales es imposible que pueda perder más votos por mucho que se pida no votarle, pues ya sólo le quedan sus incondicionales. Sin embargo, en la parte contraria, el PP es citado en todas las encuestas como ganador, si bien en algunos sitios por muy poco, y una merma de sufragios aunque sea pequeña sí puede traducirse en pérdidas importantes. Vemos, por tanto, que tan beatífica y salomónica recomendación no lo es tanto.

Añádase a esto los mensajes de los acampados, unas veces cercanos a las proclamas de la izquierda más radical, otras tan ambiguos como aquellos del 13-M que pedían paz y ya está la sospecha en marcha. Si además pensamos en la dificultad de concentrar espontáneamente a miles de personas como por arte de magia (aunque sea magia de Internet), volvemos a tener la sensación de que esta película ya la hemos visto.

¿Cui prodest indignati?

NOTA: El autor no es simpatizante, militante ni votante actual del PP.

sábado, 7 de mayo de 2011

Para la concha brillante sí hay dinero

En esta España zapateril hay poco dinero, pero siempre queda algo para cosas superfluas e inútiles: subvenciones a paniaguados, ONG misteriosas, amiguetes del progresismo, mapas del clítoris etc. Sin embargo, cuando hay que apoyar la investigación médica y científica parece que todo se vuelve racanería.

El doctor Mariano Barbacid, conocido por sus trabajos en el desarrollo de terapias antitumorales, lleva años desarrollando un nuevo fármaco que podría ser importante para el tratamiento del cáncer de pulmón. Sin embargo, se halla en la tesitura de tener que renunciar por falta de fondos. Y para más INRI, tampoco puede recurrir a fondos privados para continuar, debido a nosequé historias sobre la Ley de Fundaciones.

Aquí se lee más

Ya no es perentorio salvar vidas, que eso sale carísimo. Es mucho más interesante financiar el estudio de la concha brillante o la promoción de la igualdad de sexos en el desierto del Gobi, el caso es llenar barrigas y comprar voluntades para así tener adeptos fieles. En cambio, la investigación no es rentable políticamente porque es lenta y sus resultados no se pueden comprobar sino a largo plazo.

Ya andan por ahí los progres echando pestes del doctor Barbacid. Que si lo que quiere es enriquecerse, que si pretende usar las instalaciones públicas para luego que la patente sea privada, que si en realidad no ha inventado nada y todavía todo está en fase experimental, etc, etc. etc. Está claro que en cuanto alguien critica el maravilloso sistema “progresista” es inmediatamente desprestigiado y excomulgado civilmente y pasa a pertenecer al bando de los proscritos.

Y así andamos. Unos proscritos y otros forrándose a cuenta de la concha brillante. Una pena.

jueves, 5 de mayo de 2011

Los que no encajan


Jueves, 15 de Floreal del año CCXIX.
La legalización de la coalición que llaman Bildu, además de mover a la indignación por incluir en sus listas a elementos batasunos, vuelve a plantear nuevamente el problema del separatismo y su encaje en el mapa político español.
El artículo 2 de la Constitución establece que ésta se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles (Luego viene la historia de las Taifas y su reconocimiento, pero eso ahora aquí no interesa). Según lo expuesto, el legislador podría establecer aquí la posible ilegalidad de partidos nacionalistas o separatistas basándose precisamente en que su objetivo primordial es inconstitucional a todas luces. O, mejor dicho, para los que tengan luces.

En Francia y otros países los partidos separatistas o nacionalistas están prohibidos. Es inadmisible para la legislación gala que una asociación política tenga como uno de sus fines el separarse de la nación, por ir en contra del principio de unidad.

A aquellos que, impregnados de buenismo o corrección política, sostienen que hay que dar voz a todo el mundo se les puede argumentar que la libertad de expresión ampara a todos y cada uno puede opinar lo que quiera. Ahora bien, esos discrepantes enemigos de España pueden tener voz pero que además tengan poder no es de recibo, sobre todo si es excesivo. Una de las principales causas de la desintegración “de facto” que sufre España es el exagerado protagonismo de partidos nacionalistas y afines cuyo único objetivo es barrer para su casa a la par que echan pestes de la Nación que les sostiene.
También los correctos estiman que debe hacerse distinción entre el nacionalismo terrorista y el nacionalismo “democrático”. Es cierto, unos matan y otros no, pero todos tienen los mismos objetivos. Ya se sabe, la vieja historia del árbol y las nueces. Y todos sus fines pasan por la independencia y la destrucción de la España.
Igualmente se podría argumentar que la ilegalización de partidos separatistas aumentaría el sentimiento antiespañol y los conflictos en esos territorios. Puede que así ocurriera, sobre todo al principio, pero la mayoría de las veces aquellas ideas y teorías que han sido rechazadas mayoritariamente, soslayadas o prohibidas dejan de tener vigencia y adeptos con el tiempo y quedan reducidas a una mínima expresión. Véase, a modo de ejemplo, la escasa aceptación que los nacionalistas vascos tienen en el País Vasco Francés.
Y es que, parafraseando a César Vidal, en Francia también hay vascos y catalanes pero allí sí supieron tratar el tema.